Tenía apenas 14 años cuando todo empezó. No tenía estudios terminados, solo un fuego dentro de mí que no se apagaba. Ese mismo día que cumplí la edad, comencé a trabajar.

De día sudaba por un salario, y de noche me inclinaba sobre los libros, luchando por mi certificado de primaria y luego por el graduado escolar. Cada página que pasaba era una pequeña victoria, un grito silencioso de que no me rendiría.

A los 18 años, con el cansancio de tres trabajos en mis hombros, tomé una decisión que aún resuena en mi alma:

“A partir de ahora, solo trabajaré para mí.”

Así, en agosto de 1977, nació Manel, mi primera marca de zapatos, bolsos y complementos, que vendía en mercadillos. Este año cumplimos 48 años, y cada uno de ellos lleva grabado mi esfuerzo y mi amor.

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Un cambio que me transformó

La vida siempre tiene más que enseñarte. En 2006 hubo un gran cambio: mientras el planeta empezaba a clamar por ayuda, algo dentro de mí se removió.

No podía seguir siendo solo un empresario que intentaba ser exitoso; quería ser un hombre que dejara huella, que sanara en lugar de herir.

De mis orígenes campesinos surgió algo muy poderoso. La naturaleza, con su belleza inmensa, me llamó, y yo respondí. Decidí que mi camino debía ser sostenible.

En 2012, con el corazón latiendo fuerte y las manos temblando de emoción, di a luz a Fanatik Eco.

No te voy a mentir: fue duro, sigue siendo duro cada día. La moda rápida dominaba y domina el mundo, y yo, un soñador de Alicante, apostaba por lo contrario.

Busqué proveedores locales que entendieran mi locura, creamos piel vegetal de maíz y suelas con plásticos rescatados del mar. Cada paso fue una batalla, pero también una caricia al planeta que tanto amo.

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Fanatik Eco: mi alma en cada par o bolso

Hoy, cuando miro un bolso o par de zapatos Fanatik Eco, no veo solo moda; veo mi vida entera.

Es artesanía que abraza la tierra, es elegancia que no caduca, es mi promesa de un futuro mejor.

Nuestra nueva colección P/V 2026 es mi orgullo: cada pieza, cada diseño lleva mi historia, mi lucha y mi visión.

Para llegar más lejos, a mis casi 67 años, me he adentrado en el programa de formación Luxelling, guiado por César Val, referente internacional en lujo y fundador de VAL Academy.

Es un desafío que me emociona, porque sé que no solo me está preparando para llevar este sueño al mundo entero, sino a un nuevo mundo.

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Mi gran sueño

¿Sabes cuál es mi mayor anhelo?

Que Fanatik Eco cruce fronteras, que llegue a corazones lejanos y despierte a una generación que elija con el alma.

Quiero que cada persona que calce nuestros zapatos o abrace un bolso sienta lo que yo siento: que la belleza y la responsabilidad pueden ir de la mano.

No hago solo calzado o bolsos; estoy tejiendo un legado para mis hijos, para tus hijos, para los que vendrán después.

Esta es mi historia, pero también puede ser la tuya.

Si alguna vez has soñado con un mundo más limpio, más bonito, más justo, te invito a caminar conmigo.

Gracias por escuchar mi voz, por sentir mi pasión.
Sigamos juntos, con el corazón en alto y el propósito como guía.

¡El viaje apenas comienza!